9 mayo 2022

"En 1950, el proceso de integración europea comenzó como una decisión de poner en común la producción de carbón y acero, gracias a la idea de un político ilustrado como el ministro de Asuntos Exteriores francés Robert Schuman. Hoy, con el mismo realismo, la UE está llamada a dar un salto cualitativo decisivo: adoptar una política energética, exterior y de defensa común. Sólo la unidad de la UE, en este momento histórico, puede protegernos del abismo de la próxima guerra.  Sólo unida puede Europa ser constructora de paz. Europa necesita cambiar para afrontar los retos del nuevo mundo que avanza ante nuestros ojos". Así lo afirmó el Subsecretario de Asuntos Europeos, Vincenzo Amendola, desde la última sesión de la Conferencia sobre el Futuro de Europa en Estrasburgo, con motivo del 72º Día de Europa.

Amendola añadió entonces: "Quiero recordar, en esta ocasión, unas palabras que hoy suenan proféticas y que pertenecen a David Sassoli. En su discurso de investidura como presidente del Parlamento Europeo en 2019, Sassoli lanzó una advertencia. Debemos recuperar el espíritu de Ventotene -dijo- y el ímpetu pionero de los Padres Fundadores, que supieron dejar de lado las hostilidades de la guerra, acabar con los fracasos del nacionalismo dándonos un proyecto capaz de combinar paz, democracia, derechos, desarrollo e igualdad". Su legado sigue siendo válido y más relevante que nunca. Ahora estamos llamados a dar el siguiente paso hacia una Unión Europea que sea capaz de afirmarse como actor internacional".